¿Qué es escribir?

Una pregunta sencilla de esas que albergan un montón de contenido.

Yoana me escribía después de hacer el taller de escritura creativa grupal y me decía que quería una asesoría personalizada. Tenía muchas ganas de escribir pero no sabía por dónde empezar, no conseguía el hábito ni la inspiración. Estaba bloqueada.

Parece que empieza como la típica historia de venta pero tranqui, no te voy a vender nada. Te quiero contar algo que le vino bien a Yoana, me vino bien a mi hacerlo para ella y estoy segura de que te va a venir bien a ti para leerlo.

Le mandé un formulario para preparar su asesoría y la respuesta de una de las preguntas fue (cito textualmente)

En ocasiones consigo fluir con la escritura y me gustaría generar el hábito y hacerlo de forma continuada.También conocer estrategias a nivel creativo para poder escribir mas allá de lo objetivo y divulgativo.Escribo sin saber qué es escribir, me gustaría comprender el proceso de escritura a nivel profundo para enriquecerlo y poder disfrutar de continuo con él.

Y cuando leí esto “Escribo sin saber qué es escribir, me gustaría comprender el proceso de escritura a nivel profundo para enriquecerlo y poder disfrutar de continuo con él.” me quedé mirando la pantalla del ordenador un rato. Nunca me había planteado ¿Qué es escribir? Y ese fue el día.

Pensé en la manera de transmitírselo para conseguir lo que ella buscaba: comprender el proceso de escritura, enriquecerlo y disfrutarlo. Y, como te decía antes, fue increíble hacerlo para ella, porque también me sirvió a mi. Fue un ejercicio súper enriquecedor. Un desglose en 7 pasos del proceso de escritura para aprender a disfrutarlo.

¿Qué es escribir?

Escribir es un acto transformador. Una herramienta que te ayuda a explorar pensamientos, emociones y conexiones entre el mundo interior y exterior. La llave de la puerta de tus pensamientos que se materializan en palabras.

1. La escritura como espejo interno

   La escritura refleja lo que llevas dentro: tus emociones, tus experiencias y tu percepción del mundo. De esta manera, al escribir exploras tu interior y pones en práctica el autoconocimiento. Una forma eficaz de poner en palabras lo que sientes y piensas. Además, escribir te ayuda a conectar con lo no dicho. Muchas veces descubres pensamientos o emociones que no sabías que estaban ahí.
   

2. La escritura como proceso creativo

   El acto de escribir es un diálogo entre lo que imaginas y lo que conoces. Es sacar lo que tienes en tu cabeza a través de tu mano, ya sea por escrito o tecleando. El proceso creativo se enriquece cuando te permites jugar con las palabras, ya que partimos de la base de que escribir no tiene que ser perfecto desde el principio; puedes experimentar, tachar y cambiar. Debes experimentar, tachar y cambiar. Todo texto es susceptible de mejorar y eso está bien.

   Explorar diferentes estilos es otra manera de reanimar la creatividad. Desde la narración hasta la poesía, cada forma de escritura es una oportunidad para expresarte de maneras distintas.

3. Escribir es aprender a escuchar

   A ti misma, a tu entorno, a los personajes que creas o a las historias que quieres contar. Esto implica escuchar tus pensamientos sin juicio y para eso debes dejar que las palabras fluyan tal como surgen, y observar el mundo con detalle, ya que cada experiencia, sensación o conversación puede ser material para escribir. Te dejo un consejo muy personal, lleva siempre un cuaderno contigo para anotar pensamientos, frases o detalles interesantes que observes en tu día a día. Y si no tienes a mano ese cuaderno, notas del teléfono o, incluso, notas de voz. Una vez que entras en el proceso creativo de la escritura habitual, te va a costar no encontrar mil temas que luego te gustaría desarrollar.
   

4. La combinación entre estructura y libertad

   Pueden parecer conceptos enemigos pero la realidad es que la creatividad es algo flexible que también necesita algo de organización. Si nos centramos en la parte técnica del proceso, nos encontramos con estos dos conceptos:

   • Estructura: aprende las bases de la narrativa, como comienzos que enganchen al lector, personajes con carisma y cierres con fuerza.

   • Libertad: una vez que entiendas las reglas, puedes romperlas para adaptarlas a tu estilo. Y de esto va la creatividad.

   Por eso aquí la recomendación es que te centres en textos que te gusten, autores que admires y desgloses su contenido, analices sus palabras, entiendas las metáforas y te inspires con el objetivo final de crear tu propio estilo.
   El otro día, mientras esperábamos que nuestros hijos salieran de clase de natación, un padre me comentaba que le encanta un escritor italiano. Le daba igual la novela, me decía que estaba encantado con el uso de las palabras, que escribía bonito. Ese es un muy buen objetivo, escribir bonito para tus lectores.
   

5. La escritura como hábito

   El disfrute continuo viene con la práctica. Esto era el punto de dolor principal, de Yoana, tenía las ganas pero le faltaba crear el hábito y se me ocurrió explicárselo así. Escribir con regularidad te ayuda a:

   • Crear fluidez: cuanto más escribas, más fácil será conectar con tus ideas. Cuando más escribas mejor te conocerás y fluirás mucho más.

   • Descubrir tu estilo: cada palabra que escribes te acerca a una forma única de expresión. Crear un tono de voz es importante, no solo para que cuando te lean te reconozcan, que eso a nivel de marketing está muy bien, si no para que tú misma te reconozcas y sepas cómo te gusta expresarte, ¿por qué? porque así lo harás mucho mejor. Al principio será un caos, cambiarás, pero eso está bien. El proceso de definir tu estilo es precioso y en el camino te acompañarán un montón de palabras transformadas en textos a los que irás dándole forma. Y es posible que algún día alguien coja un texto tuyo y diga: ¡qué bonito!

   Antes hablábamos de libertad, pero al principio me parece interesante y siempre recomiendo que se establezca un tiempo fijo para escribir cada día, incluso si solo son 10 minutos. Piensa en esto como un encuentro contigo misma.

   Puede que escribas con un disparador, como los que vimos en el taller.

   Puede que escribas sin más, según vas fluyendo con la escritura automática.

   Puede que escribas por algún objeto, por algún titular, por alguna frase.

   ¿Qué más da? Lo importante es que escribas.
   

6. La escritura como conexión emocional

   Escribimos para conectar. No hace falta publicarlo, porque la escritura tiene poder cuando conecta contigo y con quien te lee.

   Cuando es contigo misma, pregúntate: ¿Qué emociones sientes al escribir? ¿Qué te mueve? Cuando es con los lectores escribe con sinceridad. Los textos que más resuenan son los que tienen autenticidad.

   Empieza escribiendo sobre lo que sabes, sobre lo que dominas, porque en lo verdadero, en lo real se encuentra mucha más empatía.
   

7. El placer de escribir sin expectativas

   Mi placer. Me dedico profesionalmente a esto, pero si me apasiona también es porque disfruto plenamente del proceso. Así es que aquí van mis tres recomendaciones:

   • Escribe para ti y olvida por un momento lo que otros pensarán. Escribe lo que te apetezca, aunque parezca caótico.

   • Permítete pausas. No todos los días tendrás inspiración, y eso también forma parte del proceso.

   • Crea el hábito.Dedica una sesión de escritura semanal a escribir sin un objetivo definido, simplemente para dejar que las palabras fluyan.
     

   Sobre todo rebaja la exigencia. No necesitas "saberlo todo" para empezar; el camino de la escritura se construye paso a paso. Al comprender que la escritura es tanto técnica como emocional, puedes enriquecer tu experiencia, disfrutar del proceso y transformarlo en una herramienta constante de crecimiento.

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Tengo muchas cosas preparadas para este año. Son tantas que me estoy aturullando. Poner orden y tranquilidad es la primera. Poco a poco iré contando las novedades por aquí para quienes se quieran animar y formar parte.

De momento, recordatorio de nuestra comunidad en Telegram a la que sois todos bienvenidos: Refugio Creativo✨

¡Hasta la siguiente carta!

Luli ✨